El subsecretario general del Episcopado, Pedro Brassesco, dijo a DyN que durante el encuentro en la Casa Rosada los obispos destacaron la importancia de la fraternidad entre los argentinos, sobre todo en vísperas de Navidad. El sacerdote precisó que Arancedo le presentó a la primera mandataria a los nuevos integrantes de la mesa ejecutiva que lo acompañan en el Episcopado: el arzobispo de Buenos Aires, cardenal Mario Poli; el vice segundo y arzobispo de Salta, Mario Antonio Cargniello y el secretario general, Carlos Humberto Malfa, obispo de Chascomús.
Brassesco definió la reunión como "un diálogo de cortesía, protocolar y cordial" y dijo que los obispos le obsequiaron un pesebre a la Presidenta. Asimismo, precisó que la mesa ejecutiva no le llevó el mensaje navideño en el que se advertía sobre la corrupción y la falta de ejemplaridad del país, porque Fernández de Kirchner lo había recibido con anterioridad por otros canales.
De la reunión con los prelados participaron también el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich; el canciller Héctor Timerman, y el secretario de Culto, Guillermo Oliveri. Luego, Fernández de Kirchner encabezó en el Salón Blanco la ceremonia de entrega de sables e insignias a los nuevos jefes superiores de las tres Fuerzas Armadas. (DYN)